ENTRAMANDO SALUD: HABLEMOS DE VIH, HABLEMOS DE SIDA

Siendo el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), una de las ITS más conocidas, Juana nos propone abordar el tema en una nueva columna de salud sexual integral de El Oeste Despierta.

Entramando Salud tuvo una nueva edición en El Oeste Despierta y, como continuación de ediciones anteriores, Juana nos propone hablar de una infección de transmisión sexual (ITS) en particular, el VIH, Virus de Inmunodeficiencia Humana.

En este sentido, nuestra columnista se encarga rápidamente en aclarar “que no toda persona que vive con VIH tiene sida”. El VIH es un virus que tiene la capacidad de afectar el sistema inmunológico, el sistema de defensas del organismo, lo que permite la aparición de enfermedades, y es a esta etapa, en la que hay un avance de la infección, a la que se denomina SIDA, Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida.

La diferencia es importante porque, siguiendo un tratamiento, las personas con VIH pueden no llegar nunca a desarrollar SIDA y, por lo tanto, tener una calidad y expectativa de vida similar a quienes no tienen el virus. La infección generada por VIH no tiene cura, pero con un tratamiento antirretroviral se puede evitar que el virus se multiplique y destruya las defensas.

Ahora bien, cómo se transmite y qué precauciones tomar para evitar adquirir la infección. Juana habla de tres vías de contagio: sexual, sanguínea y perinatal o vertical; puesto que el virus se encuentra tanto en la sangre, como en el líquido preseminal, el semen, los fluidos vaginales y la leche materna.

La vía sexual, es a través de las relaciones sexuales tanto vaginales, anales u orales; la forma de prevenir la transmisión del VIH es con el uso de preservativo o campo de látex. La vía sanguínea, a través del contacto con sangre, que puede darse al compartir jeringas, por ejemplo; el cuidado estará en no compartir elementos cortantes o punzantes, o en desinfectarlos adecuadamente.

Por último, Juana hace mención de la vía perinatal, que puede ser transmitida por la persona gestante al bebé durante el embarazo, el parto y la lactancia; y es la principal vía de transmisión de VIH en niños y niñas. Tener conocimiento de esto es importante porque con tratamiento y atención médica el riesgo de transmisión se vuelve casi nulo.

Como ya dejó claro nuestra especialista, SIDA no es lo mismo que VIH, por lo que podemos haber contraído el virus sin saberlo, por no mostrar síntomas. Para su detección existen dos tipos de testeos, el test ELISA, una extracción de sangre en un laboratorio y el test rápido, con extracción de sangre del dedo y un el resultado en 20 minutos.

Las personas que tienen una carga viral muy baja, al punto que tras métodos de diagnóstico y con un seguimiento mayor a seis meses, es indetectable, se considera que mientras mantengan el tratamiento, no transmiten el virus: “I” es igual a “I”; Indetectable es igual a Intransmisible. Juana marca como excepción, la transmisión durante la lactancia.

Como Entramando Salud es un segmento que habla de salud sexual pensada de forma integral, donde hay múltiples factores que influyen en nuestro de salud, Juana cierra la columna haciendo mención a los derechos de las personas con VIH.

Estos derechos inician desde el momento mismo del análisis para la detección del virus, el cual es confidencial y gratuito. Esto está avalado en la “Ley Nacional de Respuesta Integral al VIH, Hepatitis Virales, otras Infecciones de Transmisión Sexual y Tuberculosis” (Ley 27.675), sancionada en el 2022, que además garantiza el acceso productos médicos y no médicos para la prevención, diagnóstico, tratamiento y cura.

El estigma y la discriminación hacia las personas que viven con VIH es y ha sido frecuente, sobre todo en las primeras décadas tras su descubrimiento, que el desconocimiento y la falta aún de tratamientos efectivos, provocaban miedo y exclusión.  

En este sentido, en 1990, en Argentina se sancionó la “Ley Nacional de Sida” (Ley 23.798) que, entre otros puntos, protege el derecho a la confidencialidad de quienes portan el virus. Esto significa que no están obligados a revelar su diagnóstico en ningún caso, incluyendo trabajos o exámenes preocupacionales.