Edith Bernstein: «hay que seguir dando lucha para que esto termine»

La odontóloga, Edith Bernstein, que fue detenida y acusada de narcotráfico por vender aceite de cannabis diálogo con Raíces y sostuvo que estás acciones, de muchos intereses, no hacen más que generar un «cierto adoctrinamiento para la sociedad».

Edith Bernstein es una odontóloga platense con más de 30 años en la profesión, tiene 59 años y vive en Gonnet, en sus catorce años de edad fue diagnosticada con fibromialgia, una patología crónica que causa dolor en todo el cuerpo, fatiga, alteraciones cognitivas y de sueños, entre otros síntomas. Desde hace al menos unos seis años comenzó a elaborar aceite de cannabis con sus propias plantas y ayudando además a otra personas con patologías.

El día miércoles 1⁰ de diciembre Edith Bernstein volvía de su caminata cuando se encontró con su casa destrozada por diez agentes de Prefectura Naval que llegaron con un acta del juez Ariel Lujo dónde se le acusa penalmente a la odontóloga por narcotráfico; «fue un show Hollywoodnense» describió al aire de Raíces, Edith Bernstein durante una entrevista con El Oeste Despierta.

«Estoy pasando, quizá, la peor etapa de mi vida porque nunca he tenido una causa penal y menos por hacer el bien» sostuvo y destacando que sus productos están avalados por científicos ya que participa de investigaciones de cannabis y cáncer en la Universidad Nacional de La Plata, además Edith es convocada por diversas facultades para dar charlas sobre relativas a las propiedades de la planta.

«Jamás tuve miedo de cultivar porque estoy totalmente convencida de que lo que hago es muy beneficioso, de mucho trabajo y preparación» comentó y agregó al mismo tiempo que este atropello «es una injusticia para mí, para la gente que venía consumiendo mis elaborados y para la investigación».

Consultada por los intereses que pueden haber detrás de lo ocurrido, Bernstein aseguró que «hay muchos intereses en el mundo de la medicina porque los científicos más conocidos en el planeta aseguran que los elaborados artesanales siguen siendo los mejores porque obtenemos todo el producto que nos da la planta».

En tanto manifestó que es «un cierto adoctrinamiento para la sociedad porque genera miedo, pero hay que seguir dando la lucha para que esto termine modificando parte de la ley y se regule».

Finalmente, en ese marco, añadió»claramente hay una falta de discusión política en terminar de regularla porque la gente está desesperada y no todo el mundo puede cultivar. Tiene que haber una regulación para que de alguna manera los que proveemos, a muchas personas con patologías, podamos tener un subsidio para poder hacerlo».