ENTRAMANDO SALUD, LA NUEVA PROPUESTA DE EL OESTE DESPIERTA

Abordando la salud sexual de una manera integral, Entramando Salud se suma como nueva columna a El Oeste Despierta de la 88.9, Raíces Rock.

En esta cuarta temporada el programa El Oeste Despierta nos trae todos los martes una columna de Salud Sexual Integral a cargo de Juana y Ana, que compartirán con nosotros sus experiencias y recorridos territoriales con perspectiva de género y derechos.

Ana es docente y Licenciada en Psicología; Juana es estudiante de la Licenciatura en Obstetricia y coordinadora de un proyecto de extensión en Salud Sexual Integral; además, ambas forman parte de la Organización Comunitaria Ruedat, Red urbana de estrategias de abordaje territorial.

Ana y Juana son trabajadoras sociocomunitarias y desde ese lugar vienen a compartir sus saberes: “Queremos que este espacio sea una invitación a pensar y pensarnos a partir de preguntas. Vamos a presentar nuestro posicionamiento sobre diferentes temas a partir de nuestras experiencias y diversidades”

De esta manera rescatan el rol de las instituciones y organizaciones comunitarias al permitir una escucha activa de las comunidades en las que se encuentran, comunidades que tienen necesidades y demandas específicas, con un contexto sociopolítico, cultural y territorial también específicos, que deben ser tenidos en cuenta para pensar un abordaje de la salud de manera integral y en la promoción de la Educación Sexual Integral (ESI).

La columna irá recorriendo diversas temáticas en relación a la Salud Sexual Integral como la salud comunitaria y el entretejido de redes, el placer, el cuidado del cuerpo propio y del cuerpo del otre, la salud vulvar, la menstruación, la prevención de enfermedades de transmisión sexual, métodos anticonceptivos, interrupción voluntaria y legal del embarazo, entre otras.

Un abordaje de la sexualidad de manera integral implica correrse del concepto que piensa a la salud como ausencia de enfermedad, relacionada con el deterioro biológico, y tomar en cuenta las diferentes dimensiones que atraviesan a cada sujeto.

En este sentido Juana entiende que “es imposible pensar la salud separada, en primera instancia, de una perspectiva de derechos humanos”, con garantías de acceso a los derechos fundamentales como la comida, la vivienda, la educación pero también el derecho a la identidad, considerando el respeto por la identidad de género y orientación sexual, el derecho a recibir información en los procesos de atención en salud, el derecho a reconocer a la salud mental y sexual como procesos indisociables en la construcción identitaria y al goce del tiempo libre.

La salud sexual es una de esas dimensiones que atraviesan a los sujetos y también debe ser abordada desde una perspectiva plural donde lejos de reducir la sexualidad a la genitalidad y al acto sexual, también tiene en cuenta “nuestra identidad, nuestros orígenes, nuestros sentimientos, la manera que tenemos de vincularnos con les otres y también de vincularnos con nuestro propio cuerpo”.

Entramando Salud es una columna que propone romper con ciertos mandatos y derribar tabúes, en este sentido, Ana y Juana expresan: “Nos parece importante poder trabajar sobre estos mitos o imaginarios que todavía siguen circulando, incluso en espacios de formación como son las escuelas, universidades y espacios no formales también”.

Correr el eje del binarismo hombre/mujer y hacer hincapié en mujeres y diversidades, entendiendo a las diversidades como parte del colectivo de lesbianas, gays, trans e intersex; cuestionar la heteronorma que toma a la heterosexualidad como la única manera de sentir placer; derribar el androcentrismo a través del cual los hombres han tomado el protagonismo en la historia de la sexualidad; correr de eje la idea de que nuestros cuerpos son meros órganos reproductivos; derribar el tabú al placer y al disfrute.

Derribando estos mandatos Entrelazando Salud es una columna que promueve el derecho a tener información, a saber cómo cuidar nuestro cuerpo, cómo conectarnos con él y así también aprender a cuidar nuestra salud de manera integral, lo que implica también poder llevar adelante prácticas que nos den placer: “Por una militancia del goce, para que decidamos autónomamente y con información”, concluye Juana.