Inseguridad: Una jubilada fue víctima de un robo en su propia casa

La jubilada en cuestión tiene 85 años, y fue sorprendida en su propia vivienda en horas de la madrugada, cuando dos ladrones lograron llegar hasta ella luego de tirar abajo una puerta.

Los hechos de inseguridad no cesan en la ciudad, y en esta ocasión, una jubilada de 85 años fue la víctima que escogieron dos asaltantes durante horas de la madrugada. El suceso ocurrió el día miércoles, en la casa de la damnificada, ubicada en el barrio de Meridiano V, situado en las calles 20 entre 67 y 68.

Todo comenzó a las 02:30hs, cuando Irma escuchó sonidos que provenían de su patio, los cuales atribuyó a un choque que probablemente se había producido a lo lejos y que había “retumbado» en su casa, es por ello que intentó seguir con su descanso.

Sin embargo, apenas un par de minutos después, la mujer logró oír voces y pasos en la cocina y cuando finalmente se dispuso a ir a ver qué era lo que sucedía, dos malvivientes ingresaron a su dormitorio advirtiéndole que debía hacer silencio. El sonido que Irma había escuchado era la puerta que los ladrones tiraron para abrirse paso hasta el interior de la casa.

Además de advertirle que no gritara, también la amenazaron con hacer uso de la violencia física si no colaboraba. Al parecer, los sujetos en cuestión vestían con ropa deportiva, gorra y barbijo, lo que dificultó la posibilidad de que Irma pudiese identificarlos, aunque uno de ellos era más “jovencito” y el otro un “tipo grande”, sus edades rondarían entre los 18 y 35 años.

Al momento de actuar, el más grande de ellos procedió a revisar toda la casa en busca de objetos de valor y todo el dinero que pudiese llevarse consigo, mientras que el más joven se quedó vigilando a la mujer para que no intentase nada, y al mismo tiempo, continuar interrogándola para saber qué otras pertenecías de valor podían llevarse.

“Fue espantoso. Dos desconocidos en mi casa, yo no tenía forma de defenderme. Uno era un jovencito y el otro un tipo grande. Recuerdo que el mayor actuó de forma amable pero el que me tenía que custodiar estaba muy nervioso. Me interrogó y me empujó para que le dijera dónde tenía más plata. Si me los cruzo en la calle no los podría reconocer porque estaban muy tapados”, contó la víctima en diálogo con El Día.

Tras arrasar con la habitación, la jubilada fue obligada a levantarse de la cama y, posteriormente, a sentarse en una silla del comedor. Finalmente, como necesitaban encender la luz para hurgar entre los diferentes espacios de la casa, le envolvieron la cabeza con una sábana para neutralizar su visión.

“Encontraron mis ahorros y siguieron buscando. Me decían ‘no podés tener sólo esto. Tiene que haber más’. Era mucha plata la que agarraron. O vieron mal o no se conformaron”, evaluó.

Convencidos de que iban a hallar más dinero, rompieron cielo raso, roperos amurados y hasta el taparrollos de la cortina. La pesadilla para esta mujer tuvo una duración de casi una hora.

Lamentablemente, el caso de Irma se suma a la extensa lista de robos y hechos de inseguridad que se viene dando en la ciudad de La Plata, en donde en las últimas semanas, varios adultos mayores fueron víctimas de asaltos, teniendo que atravesar por minutos y horas de extrema tensión, a lo que la Municipalidad con Garro a la cabeza, aún no pueden dar respuesta para detener estos tipos de episodios, que son tan lamentables como angustiantes.