Rubén, hijo de Julio López: «No tienen por qué tener ningún tipo de privilegios. Son condenados por los delitos más aberrantes que pueden existir en la tierra»
Escrito por nicohernandez el 26 julio, 2016
Por Ritmo & Sustancia
El Tribunal Oral Criminal Federal N° 1 de La Plata concedió la semana pasada un pedido de detención domiciliaria solicitado por la defensa del genocida Miguel Osvaldo Etchecolatz. El ex Director de Investigaciones de la Policía Bonaerense durante la dictadura, sin embargo, no podrá volver a su casa, ya que este beneficio es otorgado sólo en una de las causas en las que está involucrado.
Rubén, hijo de Julio López, desaparecido por segunda vez el 18 de septiembre de 2006 en el marco de una de los juicios contra Etchecolatz, dialogó con Ritmo y Sustancia y se mostró preocupado por esta decisión. En el último año, 50 represores han sido beneficiados con el régimen de prisión domiciliaria.
«No comparto que estos genocidas estén en prisión domiciliaria. No me importa que sean grandes, viejos, que estén enfermos. Tienen que estar en una cárcel común.» reclamó López, quien agregó que «desde hace un tiempo pienso que estos señores que están condenados por los juicios ya no tienen título. No son ex-comisarios, no son ex-militares, porque tuvieron una baja deshonrosa de cada fuerza que estuvieron. Así que simplemente me parece que hay que tratarlos como presos comunes».
También se mostró disconforme respecto a que algunos de los genocidas detenidos son atendidos en el Hospital Militar. «Tanto él -Miguel Etchecolatz- como cualquier otro tienen que atenderse en los hospitales de las cárceles, igual que cualquier otro», y agregó que «No tienen por qué tener ningún tipo de privilegios. Son condenados por los delitos más aberrantes que pueden existir en la tierra, entonces me parece que no corresponde».
Respecto a la causa por la segunda desaparición de su padre, Rubén expresó que están en una situación de «denegación de justicia, porque no se sabe nada. No tenemos avances, no ha habido nunca una pista real. Si sospechas, pero nunca una pista real». Manifestó que recién cuando tenga pistas comprobables que sirvan para juzgar acusará a quienes sean los instigadores y los que llevaron adelante la segunda desaparición. «Trato de creer que la justicia investiga» concluyó.
«No comparto que estos genocidas estén en prisión domiciliaria. No me importa que sean grandes, viejos, que estén enfermos. Tienen que estar en una cárcel común.» reclamó López, quien agregó que «desde hace un tiempo pienso que estos señores que están condenados por los juicios ya no tienen título. No son ex-comisarios, no son ex-militares, porque tuvieron una baja deshonrosa de cada fuerza que estuvieron. Así que simplemente me parece que hay que tratarlos como presos comunes».
También se mostró disconforme respecto a que algunos de los genocidas detenidos son atendidos en el Hospital Militar. «Tanto él -Miguel Etchecolatz- como cualquier otro tienen que atenderse en los hospitales de las cárceles, igual que cualquier otro», y agregó que «No tienen por qué tener ningún tipo de privilegios. Son condenados por los delitos más aberrantes que pueden existir en la tierra, entonces me parece que no corresponde».
Respecto a la causa por la segunda desaparición de su padre, Rubén expresó que están en una situación de «denegación de justicia, porque no se sabe nada. No tenemos avances, no ha habido nunca una pista real. Si sospechas, pero nunca una pista real». Manifestó que recién cuando tenga pistas comprobables que sirvan para juzgar acusará a quienes sean los instigadores y los que llevaron adelante la segunda desaparición. «Trato de creer que la justicia investiga» concluyó.