Ni Una Menos, el gran movimiento de mujeres
Escrito por Federico Fiore el 3 junio, 2021
Todos los 3 de junios, miles de mujeres salen a las calles para denunciar la violencia machista y los femicidios. El brutal asesinato de Chiara Páez, una joven de 14 años embarazada, dio origen Ni Una Menos en el 2015.
No es un día festivo. Es la reivindicación de los derechos de la mujer frente a una violencia machista que asesina a millones de mujeres en el mundo entero.
El 3 de junio del 2015, miles de mujeres salieron a las calles para reclamar justicia por el femicidio de Chiara Páez, una joven de 14 años embarazazada, quien falleció por los golpes propiciados por su pareja, Manuel Mansilla de 16 años, en Rufino, Santa Fe.
Desde ese entonces, comenzó una verdadera revolución en la Argentina, había comenzado la revolución feminista.
Temas que antes eran invisibilizados por diversos motivos, pasaban a ser parte de la agenda pública y la desconstrucción iniciaría para derribar «estigmas» culturas arraigados de una sociedad que había quedado atrasada en materia de género.
En un país donde al femicida lo encausaban bajo la caratula de «homicidio pasional», pasaba a discutir sobre el aborto, políticas que protegieran a la victima en situación de violencia domestica e igualdad salarial en relación a lo ganado por hombres, políticas de cuidado indispensables para promover la inserción laboral de las mujeres en condiciones de igualdad; la paridad en espacios de decisión; la eliminación de las barreras para el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos. Argentina estaba en proceso de cambio.
El Ni Una Menos comenzó bajo un lema muy simple pero doloroso: «Basta de matar mujeres». Según el último informe de 2018 del Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe de Cepal, en solo ese año más de 3.500 mujeres en la región fueron víctimas de femicidio o feminicidio, es decir el asesinato por su condición de género.
«Ni una menos nació ante el hartazgo por la violencia machista, que tiene su punto más cruel en el femicidio», reza el inicio de la carta orgánica del movimiento de mujeres Ni Una Menos.
«‘Ni una menos’ es la manera de sentenciar que es inaceptable seguir contando mujeres asesinadas por el hecho de ser mujeres o cuerpos disidentes y para señalar cuál es el objeto de esa violencia», continua.
A partir de ese momento, se comenzaron a crear diferentes instituciones encargadas de registrar y brindar asistencia a las victimas de violencia machista. Se creó la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y comenzó el Registro de Femicidios (una de las primeras reacciones oficiales a las demandas del movimiento).
Pese a los esfuerzos mancomunados del Estado, que en muchos casos es el principal culpable de las miles de muertes de mujeres, instituciones y organizaciones políticas, sociales y populares, Argentina muestra tasas muy preocupante en cuanto a femicidios. Si bien hoy en día existe una mayor visibilizarían de la problemática, las muertes de mujeres por ser mujeres no cesa.
Según datos del Registro de la Corte, durante el 2020 el 70% de los femicidios son perpetrados por parejas actuales o pasadas (muchas veces con denuncias previas) sumado a otras personas cercanas o familiares.
Esta cifra solo deja en evidencia el accionar de una justicia ciega que, en vez de proteger a las victimas, aporta muy poco en materia de prevención. En varias ocasiones las mujeres que realizan las denuncias correspondientes se van solamente con un papel firmado.
En el 2020, la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación registró 251 víctimas de violencia machista, un crimen cada 35 horas. Desde el 20 de marzo de 2020 al 19 de marzo de este año el 64,9% de los femicidios ocurrieron en el hogar de la mujer.
La pandemia agravó una situación irreversible. En este sentido, la línea 144 confirmó que durante la cuarentena el 63% de los femicidios ocurrieron en la vivienda de la víctima y el 84% conocía a su asesino. Anteriormente, la mujer podía huir de su pareja pero ante la imposibilidad de escapar por la situación sanitaria del país, quedaba encerrada en su propia cárcel.
Desde 2015 ha dejado en el país 1.733 feminicidios, según datos contabilizados por organizaciones sociales. Del total de víctimas por la violencia machista, 1.305 hijos e hijas han quedado huérfanos de madre y el 64 % no alcanza la mayoría de edad, revela el Observatorio de Femicidios «Adriana Marisel Zambrano», coordinado por La Asociación Civil La Casa del Encuentro.
Durante los primeros cinco meses del 2021, Argentina sufrió un feminicidio cada 25 horas con un total de 143 mujeres asesinadas por violencia de género, de acuerdo a números suministrados por la entidad feminista Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá).
El Ni Una Menos nació para ponerle fin a la violencia machista. En Argentina todavía siguen matando mujeres por ser mujeres. El Ni Una Menos, a seis años de su creación, sigue siendo indispensable para lograr una sociedad más equitativa.
Ni una Menos
