Ni flores ni bombones.
Escrito por nicohernandez el 8 marzo, 2018
El 8 de marzo no es un festejo, millones de mujeres en todo el mundo salen a la calle para luchar por la igualdad de genero, en contra del acoso sexual, físico y psicológico y principalmente para derrocar al patriarcado que domina la sociedad mundial.
El 8 de marzo no es un festejo mundial, es un día de lucha por los derechos de la mujer, que día a día, son pisoteados con las botas del sistema patriarcal que buscar dominar al genero femenino.
En 1857 un grupo de trabajadoras textiles decidió salir a protestar sobre las calles de Nueva York para reclamar mejoras sobres las condiciones laborales. Este hecho fue un cambio de paradigma y a partir de allí varias mujeres comienzan a tomar su ejemplo y levantar su voz para reclamar por sus derechos.
Pero unos años mas tarde, en la fabrica Triangle Shirtwaist de Nueva York, 129 mujeres, en su mayoría jóvenes e inmigrantes, murieron calcinadas producto de la desidia de sus empleadores ya que las puertas estaban cerradas para que no pudieran escaparse de sus puestos de trabajos.
En la actualidad, solamente en Argentina, según datos obtenidos de medios gráficos y televisivos por la organización MuMaLá (Mujeres de la Matria Latinoamericana) entre el primero de enero y el 28 de febrero se produjeron 47 femicidios. El 20% de las victimas había realizado denuncia previa, el 17% tenían medidas de protección. Durante el 2017, según la Suprema Corte de Justicia hubo 295 mujeres asesinadas. Se estima que durante la ultima década 2.600 mujeres perdieron su vida por el simple hecho de ser mujeres.
Ademas, el gobierno nacional recortó, únicamente en el 2018, un 17% del presupuesto del Instituto Nacional de las Mujeres que lucha para erradicar la violencia de genero en nuestra sociedad,
A pesar de que el presidente Mauricio Macri enviará al Congreso de la Nación un proyecto de ley para que se cumpla con el salario igualitario entre varones y mujeres, según el Observatorio de Empleo, Producción y Comercio Exterior la informalidad entre mujeres ascendió a 36,2%, creciendo un 1,2% respecto a 2015. El ultimo informe de OEPCE las brechas salarial entre los géneros trascendió de 26% a 32%, es decir que la mujer sigue siendo victima del sistema laboral que premia al hombre por el simple hecho de ser hombres y niega las capacidades de las mujeres.
Si bien no existe una cifra oficial sobre fallecimientos durante abortos clandestinos, desde las organizaciones sociales estiman que desde el retorno de la democracia 3.030 mujeres murieron en condiciones infrahumanas por no disponer de los recursos económicos para poder hacerlo en un clínica de prestigio.
Los datos expresados anteriormente son una clara muestra de que vivimos en un sistema desigual, machista y patriarcal que denigra a las mujeres, las asesina y no permite que sean libres de decidir sobre su propio cuerpo.
Por eso mismo, las mujeres no quieren flores ni bombones. Quieren Aborto Legal, Seguro, y Gratuito, condiciones laborales y garantías del Estado igualitarias entre los géneros y principalmente que dejen de ser asesinadas, violadas y desaparecidas para ser objetos en la red de tratas.
Abajo el machismo, abajo el patriarcado. Arriba la igualdad, arriba el feminismo. Como dijo el Indio Solari: «Con el rostro gustoso, sin máscara que tape el mohín de tu desdén. Con los puños en alto deseando al final hacer la revolución».
