El cura Raúl Sidders irá a juicio oral
Escrito por Brandon Escobar el 28 septiembre, 2021
La fiscalía dio por acreditado que los abusos se llevaron a cabo entre los años 2004 y 2008, período en el que Raúl Sidders acosó a una menor de edad.
Raúl Anatoly Sidders es un cura que, tendrá que llevar su defensa a la instancia de debate oral, tras ser procesado por presunto abuso sexual de una niña en un colegio de La Plata. El expediente del implicado en el delito, fue elevado para su debate público debido a que Agustín Crispo, el juez de Garantías, hizo lugar al pedido de la fiscalía. Asimismo, el letrado Marcelo Peña quien está a cargo de la defensa, tiene plazo para apelar la resolución y llevar su planteo de absolución ante la Cámara Penal de La Plata.
Los abusos tuvieron lugar durante el lapso transcurrido entre 2004 y 2008, de acuerdo al fiscal Álvaro Garganta. En aquel momento, la menor asistía al colegio San Vicente de Paul, establecimiento donde ocurrieron los hechos que le provocaron “un grave daño en la salud mental”.
Por otro lado, en sintonía con lo expresado en el expediente del cura Sidders, el mismo abusó de la menor que hoy tiene 27 años, y a la que aseguró no conocer, de paso aprovechó para negar todos los cargos y pedir una pericia de salud mental para la víctima, la cuál confesó que fue acosada por el sacerdote desde los 11 años.
Luego de lo que fue la presentación judicial, el obispado de Iguazú sentó postura y respaldó a Sidders, argumentando que todo gira en torno a una noticia que no es verdadera. Además, producto de un comunicado emitido por la curia platense, el arzobispo Víctor Manuel Fernández solicitó que Sidders no tenga contacto alguno con menores mientras es investigado por la justicia.
Según consta en el pedido de detención, el sacerdote de 60 años, que en su indagatoria manifestó que tiene problemas de salud y sufrió dos infartos, abusó de la niña “a quien hacía colocar sus manos en los bolsillos de la sotana y sentir su pene erecto, situaciones que acaecía en el patio de la institución y durante los recreos, que provocó un grave daño en la salud mental de la niña”.
“Asimismo, y en las habituales ocasiones en las que recibía el sacramento de confesión, corrompió a la menor mediante explicaciones personalísimas sobre cómo masturbarse, realizar sexo oral y mantener relaciones sexuales con acceso carnal con su novio”, detalló el fiscal en su escrito.
“Me preguntaba si sabía masturbarme, y como le decía que no, me explicó con sus dedos sin tocarme, cómo tenía que hacer. Me sugirió que lo hiciera pensando en él y que en la próxima confesión le contara cómo me había sentido”, contó la joven.