Pantalón Cortito, el corazón de San Carlos
Escrito por Federico Fiore el 4 agosto, 2021
Con la llegada de la pandemia y la imposibilidad de continuar con la normalidad cotidiana, que implicó la perdida de trabajo real, la Organización Comunitaria Pantalón Cortito desplegó sus recursos para ayudar a los más vecinos más carenciados de la zona, como lo viene haciendo desde 1987.
Con la salida del sol, las cocineras de Pantalón Cortito se calzan sus gorros y delantales, gastados por el uso diario, y comienzan con la difícil tarea de alimentar más de 400 familias y 70 niños y adolescentes que concurren al Jardín Maternal, Casa del Niño y Centro Juvenil, aquellos olvidados históricamente por el sistema, en la actualidad por Julio Garro y devastadas por una pandemia que sigue arrasando los recuerdos de una vida «normal».
La Asociación Civil Pantalón Cortito surgió en el año 1987, en un predio ubicado en el corazón de San Carlos, para dar respuesta a las necesidades de los vecinos que sufrían la desidia estatal y los porvenires de la hiperinflación. De esta manera, la Asociación Vecinal 22 de Agosto y la Mutual Talleres le dieron forma a una organización que, sin saberlo, se volvería en un emblema de la comunidad, un pilar fundamental para educar y salvar de la calle a miles de niños y darle una mano a los más necesitados.
De esta manera, generaciones enteras pasaron por Pantalón Cortito, todos recuerdan su paso con una sonrisa, sus años más felices lo vivieron ahí, un lugar lleno de ternura y amor.
Por años se protegió a familias enteras con diversos programas vecinales como Auto-Construcción de Viviendas, llevado a cabo en 1998, la creación de una emisora para relatar las problemáticas que afrontaban las regiones de la ciudad como FM Raíces, allá por 1992; se puso en funcionamiento la Biblioteca Popular; se creó la Escuela Complementaria de Formación socio-humanista, laboral y ecológica Simón Rodríguez en el año 2004, e inculcaron el Trabajo de Promoción y Difusión de los Derechos de los Niños.
La Crisis del 2001 encontró a Pantalón Cortito fortalecido por la labor de sus trabajadores y comenzó a brindar la asistencia necesaria para contener a las familias más castigadas por las políticas neoliberales que implosionaron nuestro país y dejaron en la ruina a millones de argentinos.
Con el pasar de los años, la Organización Comunitaria fue creciendo a pasos agigantados gracias, nuevamente, a sus trabajadores y las políticas inclusivas de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, que permitieron expandir las fronteras de San Carlos y llevar la ayuda necesaria a los barrios populares y más relegados de La Plata.
Asimismo, aquello que había nacido para dar respuesta a los vecinos de la zona castigados por la hiperinflación, se transformó en un gigante que contuvo, contiene y contendrá a las miles de familias olvidadas por el sistema.
En este sentido, en Pantalón Cortito se llevan a cabo diferentes proyectos para contener a niños y adultos, de diferentes contextos:
- Jardín y Maternal Comunitario
- Casa del Niño/Centro de Día
- Centro Juvenil
- Talleres educativos, artísticos y deportivos
- Comedor y Panadería Comunitario
- Gabinete Social
- Centro de Salud Comunitario Tekó Porá
- Escuela Primaria para adolescentes y adultos
- Plan FINES II
- Radio Comunitaria FM Raíces Rock
- Feria Comunitaria
- Orientación jurídica
- Biblioteca Comunitaria
- Huerta y Proyecto de Soberanía Alimentaria
Pantalón Cortito logró sobrevivir a las peores gestiones nacionales; desde Menem hasta Macri, sin embargo un virus llegó y desconcertó al mundo entero.
Desde temprano, Ramona, Elisa, Virginia, María, Verónica, Sandra, Luz e Isabel, ponen su corazón para cocinar. Todos los días deben hacerlo para más de 400 familias que se acercan al Comedor de Pantalón Cortito.
Además de alimentar a los vecinos, las cocineras se encargan de proporcionar el desayuno, almuerzo y merienda a niños y adolescentes que asisten al Hogar, así como también, a los trabajadores comunitarios de la organización comunitaria.
A partir de las 7 am, con los primeros rayos de sol que caen sobre San Carlos, Verónica, desde su panadería, comienza a amasar los panes y los deja elevar hasta la hora de meterlos en el horno industrial.
Mientras tanto, las chicas se reparten el trabajo del desayuno para los niños y el comienzo de la producción diaria. Todo lleva su tiempo y demasiado amor, sino sería imposible cocinar tantas cantidades y tan rico.
Pero no es solamente entregar un plato de comida, entre otras actividades de la Organización Comunitaria, se destaca, entre otras actividades, el Centro de Salud Tekó Porá, donde medicxs, psicólogxs, odontólogxs, ofrecen su profesión para cuidar a los vecinos.
Pantalón Cortito es el corazón de San Carlos. Es la respuesta frente a las necesidades de los vecinos, aquellos olvidados por el Estado, por la política macrista y garrista, aquellos que son señalados por su manera de vestir, aquellos que son discriminados por su color de piel, aquellos que no encuentran una oportunidad en el sistema, aquellos que no son respetados por las personas de traje.
Todo esto es Pantalón Cortito, Verónica amansando el pan a las siete am, Ramona picando cebolla una bolsa enteras de cebollas o Isabel revolviendo la sopa de vegetales para calentar el alma de los niños. Es Adrián, medico de Tekó Porá, vacunando contra la gripe a los vecinos.
Frente a la desigualdad, Pantalón Cortito levantará sus banderas para luchar por una sociedad llena de más justa, inclusiva y, por sobre todas las cosas, para que reine en el pueblo el amor y la igualdad.