Guernica: «No somos delincuentes, somos familias trabajadoras en lucha por una vivienda digna»
Escrito por Mayra Ravainera el 14 septiembre, 2020
Hace más de 50 días que 2.500 familias están peleando por un lugar para vivir y construir sus casas. Sin embargo, el Poder Judicial de la provincia ordenó el desalojo de las 100 héctareas a pesar de que no son adjudicables a ningún propietario.
«Nos somos delincuentes, somos familias trabajadoras, que sufrimos la desocupación y la pobreza creciente, y estamos dispuestos a pelear por una vivienda digna y por un pedazo de tierra» reza el comunicado con el que las familias de Guernica convocan a vecinos a sumarse a la movilización de mañana para apoyar la «recuperación de tierras».
La ocupación de 100 hectáreas en la ciudad de Guernica se llevó a cabo entre el 20 y el 24 de julio, en donde las familias se asentaron en terrenos en los que, hasta ahora, no se pudieron adjudicar a ningún propietario.
Ante el inminente desalojo, este martes se llevará a cabo una mesa de diálogo entre funcionarios municipales, provinciales y vecinas representantes de las 2500 familias que se encuentran en la ocupación pacífica de tierras en Guernica.
Según el mensaje difundido por las familias «el propio Juez Martín Rizzo que dictó el desalojo, no puede mostrar en la causa que alguien haya presentado títulos de propiedad, ni escrituras de las tierras. Es claro que responde a los intereses de los countries y los políticos de que están en ese negocio».
Yamila es delegada general en las tierras ocupadas de Guernica y quien, en una extensa charla con Raíces, contó que recorre de punta a punta las 100 hectáreas que comprende la «ocupación»: «terminás conociendo a todas las familias y sus historias tienen un común denominador que es ‘me quedé sin trabajo por la pandemia y no me quedó otra’ y estamos en esta situación».
«Esto no es algo que le pasa a una familia particular, es algo más colectivo» afirmó Yamila, quien también es trabajadora social, y agregó que esto es «una problemática que se da a nivel nacional, no son casos aislados. La población más vulnerada por la pandemia está en esta situación».
En los terrenos se realizaban, hasta hace unos días, asambleas todos los días, «porque todos los días nos encontrábamos con noticias nuevas» contó la delegada, y ahora se hacen tres o cuatro veces por semana «asambleas generales de los puntos, que son cuatro, y después asambleas de delegados/as, que cada manzana elige dos, y dentro de eso se eligió a cuatro voceras generales, yo soy una de ellas».
En la reunión de mañana, las familias esperan propuestas y soluciones concretas al problema habitacional y una reunión con el gobernador provincial, Axel Kicillof, para frenar las órdenes de desalojo de las 2.500 familias.
«Como un escenario ideal me encantaría que podamos llegar a una solución, pero no sé si se va a llevar a cabo teniendo en cuenta que esta segunda mesa de diálogo tendría que haber sido hace 15 días atrás», aclaró la delegada general.
Asimismo, Yamila afirmó que la propuesta será «poder quedarnos en esas tierras o encontrar una solución conjunta»: «Creo que acá hay una necesidad habitacional bastante grande en la que yo creo que si las familias obtienen una respuesta, sea cual sea, para poder tener un pedazo de tierra donde vivir, va a ser aceptado», agregó.
Desde la asamblea plantean conseguir «un plan de viviendas para que las familias puedan tener un lugar propio» en el peor de los casos en cuanto a las tierras de Guernica, ya que un hogar «es la necesidad de familia, acá no hay negocios inmobiliarios como muestran y dicen los medios hegemónicos«.
CRONOLOGÍA DE UNA OCUPACIÓN DE TIERRAS
«Nosotros le llamamos proceso de recuperación de tierras», explicó Yamila con respecto a casi de dos meses en los terrenos de Guernica. «Desde fines de julio estamos acá y se ha dicho de que siguieron ingresando familias, pero la realidad es que todas ingresaron entre el 20 y el 24 de julio, en donde las 100 hectáreas se poblaron con 2500 familias».
Previo a la ocupación, muchas familias se encontraban en una situación de hacinamiento o siendo desalojados de sus alquileres, con contratos precarios, por no poder seguir págandolos: «Todo eso nos llevó a esta situación, fue extrema necesidad», contó Yamila.
Yamila tiene 25 años. Desde los 20 vive sola y tenía independencia económica hasta que se quedó sin trabajo a causa de la pandemia: «En el caso de cinco de mis ocho hermanos se han quedado sin trabajo o se le han reducido los sueldos no pudiendo sostener un alquiler y terminamos parando todos en la casa de mi mamá».
«Mis hermanos ya tienen su familia, así que en un terreno de 10×30 conviviendo 10 familias es un montón« comentó la delegada. Fue así que se dio la situación, al igual que en muchos casos: «Mi caso es el más leve de todas las historias que te encontrás en Guernica; hay familias que vivían en la calle con sus hijos que lamentablemente están en una situación bastante vulnerada», afirmó.
Luego de la primera mesa de diálogo con el funcionarios estatales, a fines de agosto, no se se presentaron grandes propuestas a las familias, por lo que se planteó una segunda dentro de los próximos diez días: «Pero ya pasaron más de 15, y además luego de esa mesa, la intendenta del Partido de Presidente Perón se reunió con 14 intendentes que se pronunciaron a favor del desalojo», remarcó Yamila.
Además, incluso luego de la segunda fecha de desalojo «no se ha presentado ningún documento ideal que acredite que estas tierras tengan un dueño«, afirmaron desde la asamblea. Por eso creen que «hay muchos intereses políticos y tiene que ver con esto de que los countries toman tierra con ayuda del estado. Los privilegios del rico que el pobre carece«.
Las 2.500 familias son representadas y acompañadas por la gremial de abogados desde hace un mes, días previos a la primera fecha de desalojo que fue comunicada a los ocupantes de los terrenos.
Por otro lado, en cuanto a los dichos y denuncias públicas de muchos medios de comunicación y funcionarios sobre el rol y la incidencia de las organizaciones sociales en la toma de tierras, la vocera general de la asamblea aclaró que la situación «se dio entre vecinos y vecinas, gente independiente».
«Las familias intentaron hablar con funcionarios y al no haber respuesta ni siquiera una asistencia alimentaria para las ollas populares -porque nuestro bolsillo no daba para más- aparecieron las organizaciones sociales, en las que muchos participamos, para acompañar este proceso y son quienes le pagan a los abogados, por ejemplo», comentó Yamila.
Además, la trabajadora social remarcó que los grande medios «siempre quieres correr el eje central de lo que está pasando, que es que muchos no tenemos dónde vivir».
EL CRUCE CON LA INTENDENTA BLANCA CANTERO
Blanca Cantero es la intendenta del Partido de Presidente Perón, y luego de 40 días de ocupación, se reunió con las voceras de la asamblea de Guernica: «Nos recibió de forma obligada, -contó Yamila- y durante la primera y unica mesa de diálogo, se dedicó a tratarnos como delincuentes, nos hemos sentido basureadas y mintió diciendo que nosotros no aceptamos diálogo, o intervención del Estado».
«La intendenta le prometió a vecinos y vecinas que en esas tierras se iban a quedar; se los censó y se tomaron datos de algunas familias, y luego decidieron imputar a 533 esas personas que habían sido censadas», expresaron desde la asamblea. Después de eso nadie quiso volver a dialogar con el municipio.
Muchas de estas familias votaron a la actual intendenta en las últimas elecciones, «confiaron en ella, y a los cuatro días de ese censo, llega una imputación», expresó Yamila. En esa mesa de diálogo llegamos al acuerdo con funcionarios provinciales de que si se vuelve a hacer un censo, se va a encargar la Facultad de Trabajo Social de la UNLP para llevarlos a cabo.
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