Melancolía ¿disfrutamos de estar mal?
Escrito por Brandon Escobar el 15 octubre, 2025
El psicólogo, Alberto Sánchez, abordó la melancolía como eje central de su columna, y analizó las vertientes que la componen. Además, brindó algunas herramientas para ayudar a quienes la padecen.

En una nueva columna de El Oeste Despierta, el psicólogo, Alberto Sánchez, continuó con una de las temáticas que surgió de su último análisis, y se trata de la melancolía y la siguiente interrogante ¿nos gusta estar mal?, como disparador para profundizar en la cuestión.
«La melancolía es una característica de la depresión. Hay gente que suele tener mal humor crónico. Puede deberse a una situación melancólica derivada de una depresión», dijo en un comienzo.
«Aunque también hay quienes no tienen ese diagnóstico, y sin embargo, son personas que se irritan fácil, lo primero que ven es lo negativo, y pueden contagiar a quienes los rodean», sostuvo Sánchez.
Y añadió: «El mal humor también puede ser una característica de un tipo particular de carácter en algunas personas. Puede sufrirlo uno mismo, donde la vida parece una porquería, o podemos tener personas a nuestro alrededor con esas características».

¿NOS GUSTA ESTAR MAL?
«En nosotros hay dos tendencias que todos los seres humanos tenemos. Algunas están más desarrolladas de un lado que del otro. Son pulsiones. En una parece que todo está mal, y está la preferencia de que todo este mal, para regocijarse», mencionó.
«Si es en uno, para que la vida no sea tan gris, hay que revisar qué es esto que a uno le sucede, sobre todo si es crónico», dijo.
«Uno puede no comprar tan fácilmente lo que nos venden, y saber que todo se termina, y que en la vida no todo resulta bien. Ahora, eso también puede llevarnos, casi como una filosofía de vida, de decir: ‘si esto es verdad, entonces vivo intensamente'», manifestó.
«No necesariamente el saber que nuestro fin es la muerte, que todo se termina, que la felicidad es solo en pequeños momentos, nos tiene que conducir a tener una visión depresiva. ¿Por qué no pensarlo al revés? Ya que todo dura tan poco, a disfrutar, a pasarla bien, a no joderle la vida a nadie, y a colaborar a que todo funcione mejor mientras yo esté acá», reflexionó.
«Estas son dos maneras distintas de conducirse a partir de la realidad de que todo tiene un fin. Son dos posibilidades», sentenció.

«No critico a quienes ven la parte que no está buena. Lo que digo es, que eso no sirva para ponernos peor y conducir a nuestro entorno a sentirse peor, sino a tener muy presente el hoy, el aquí y el ahora, casi como una filosofía de vida», complementó.
«A veces esta bueno hacer un ‘relanzamiento’, donde me tomo tiempo para ver un capítulo de una serie, o para tomar unos mates. Y después voy de nuevo por aquello que no me salió. Nuestra mente necesita retirarnos unos minutos del problema, para luego volver, tras desconectarse de la mala onda», cerró.
¿CÓMO AYUDAR A QUIENES ESTAN DE MAL HUMOR?
«Lo que no hay que hacer, es decirle ‘que cara’, o ‘que mal humor’, sino ponerle un poco de humor si es posible. Pero es fundamental la escucha atenta, y amorosa. Puede hacer más que mil palabras. A veces, no es lo que decimos sino la actitud que tenemos», exclamó.
«Lo que sí recomiendo, es no hacer el esfuerzo de cambiar al otro, porque va a ser muy refractario a nuestros intentos, y lo que va a pasar es que nos vamos a poner mal nosotros, por no lograr el objetivo, y nos va a contagiar», concluyó.